Por Tania Guzmán y Juan Manuel López
Al recordar nuestra infancia, pensamos en el momento cuando nuestros padres y abuelos nos regalaron nuestro primer juguete, aquel que por largos ratos nos acompañaron en cada aventura, en cada sueño y que gracias a nuestra imaginación, podíamos transportarnos de un escenario a otro, de una historia a otra, convertirnos en los héroes de nuestros propios cuentos.
Sin dudar podríamos disfrutar un buen día juego en compañía de nuestros hermanos, primos y vecinos, no importaba si nuestros juguetes eran de madera o si eran de cartón, el material no importaba, lo que realmente buscábamos era divertirnos, reír y compartir.
No faltaba el niño que salía corriendo con las canicas, los carritos y trenecitos de madera, el balero, el yoyo, el trompo, las famosas tablitas que no paraban de hacer click clack! Y por supuesto las niñas con sus muñecas de trapo, su juego de té hechos de barro, casitas y muebles de madera, de repente nos sorprendía una serpiente de madera, que para muchos de nosotros fue nuestro principal cómplice al asustar.
Cada uno de estos juguetes guarda el trabajo, la inspiración, sensibilidad, creatividad y habilidad manual de cada uno de los artesanos mexicanos, que día a día tallan, lijan y pintan de muchos colores estos lindos juguetes que pronto llevaran no solo alegría a un niño, sino una grata y bella experiencia que marcara su vida.
Los juguetes artesanales ocupan un lugar importante entre los niños mexicanos, en el país se encuentra una gran variedad de juguetes populares, muchos de ellos cumplen con la finalidad de enseñar a los niños y adultos los aspectos de la vida de una región, algunos de ellos están creados para hacernos saltar, reír, gritar, rodar y sobretodo divertirnos. Actualmente estos bellos juguetes están quedando en el olvido, más aun por la competencia de las marcas nacionales y extranjeras, que lanzan campañas publicitarias para vender la idea a los niños que deben de poseer un juguete de moda para poder divertirse.
Es por eso que en ¿Qué hago hoy? nos dimos la tarea de mostrarles la forma de poder matar el aburrimiento construyendo algunos de estos juguetes tradicionales para que puedas compartirlo en familia y con tus amigos. Recordar nuestros juguetes populares es retomar una tradición de nuestro bello país que es México.
Al recordar nuestra infancia, pensamos en el momento cuando nuestros padres y abuelos nos regalaron nuestro primer juguete, aquel que por largos ratos nos acompañaron en cada aventura, en cada sueño y que gracias a nuestra imaginación, podíamos transportarnos de un escenario a otro, de una historia a otra, convertirnos en los héroes de nuestros propios cuentos.
Sin dudar podríamos disfrutar un buen día juego en compañía de nuestros hermanos, primos y vecinos, no importaba si nuestros juguetes eran de madera o si eran de cartón, el material no importaba, lo que realmente buscábamos era divertirnos, reír y compartir.
No faltaba el niño que salía corriendo con las canicas, los carritos y trenecitos de madera, el balero, el yoyo, el trompo, las famosas tablitas que no paraban de hacer click clack! Y por supuesto las niñas con sus muñecas de trapo, su juego de té hechos de barro, casitas y muebles de madera, de repente nos sorprendía una serpiente de madera, que para muchos de nosotros fue nuestro principal cómplice al asustar.
Cada uno de estos juguetes guarda el trabajo, la inspiración, sensibilidad, creatividad y habilidad manual de cada uno de los artesanos mexicanos, que día a día tallan, lijan y pintan de muchos colores estos lindos juguetes que pronto llevaran no solo alegría a un niño, sino una grata y bella experiencia que marcara su vida.
Los juguetes artesanales ocupan un lugar importante entre los niños mexicanos, en el país se encuentra una gran variedad de juguetes populares, muchos de ellos cumplen con la finalidad de enseñar a los niños y adultos los aspectos de la vida de una región, algunos de ellos están creados para hacernos saltar, reír, gritar, rodar y sobretodo divertirnos. Actualmente estos bellos juguetes están quedando en el olvido, más aun por la competencia de las marcas nacionales y extranjeras, que lanzan campañas publicitarias para vender la idea a los niños que deben de poseer un juguete de moda para poder divertirse.
Es por eso que en ¿Qué hago hoy? nos dimos la tarea de mostrarles la forma de poder matar el aburrimiento construyendo algunos de estos juguetes tradicionales para que puedas compartirlo en familia y con tus amigos. Recordar nuestros juguetes populares es retomar una tradición de nuestro bello país que es México.
Como hacer un Rehílete
Materiales Hojas de colores Palitos de madera Tachuela y/o alambre Tijetas y/o cutter Pegamento líquido (Resistol blanco, UHU, silicón frio) Regla Lápiz Procedimiento Paso 1. tomar una hoja de color y la doblarla por la mitad, de tal forma que nos quede un triángulo, cortar la tira sobrante de papel. Paso 2. Desdoblar el triángulo de tal forma que nos quede un cuadrado, volvemos a doblar nuestra hoja, de tal manera que nos queden los dobleces cruzados. Paso 3 con una regla medimos 4 cm del centro de nuestra hoja hacia cada una de las esquinas marcando con un punto el límite del corte, cortamos el papel partiendo de las esquinas hacia el centro. Paso 5 colocar un poco de pegamento liquido en centro de nuestra hoja y en cada una de las esquinas alternándolas Paso 6 pegamos dada una de las 4 esquinas y sostenemos un momento hasta comprobar que no se desprendan. Paso 7 cortar circulitos de papel de 1 cm aproximadamente y pegarlos en el centro del rehilete Paso 8 tomamos un palito de madera y enrollamos un poco de alambre para sujetar nuestra hoja de papel Paso 9 colocamos la hoja de papel sobre el alambre Paso 10 listo!!! Es momento de salir al patio para ver funcionar nuestro rehilete | |
Como hacer un Papalote de plástico
Materiales
Bolsa de plástico
Carrete de hilo
2 palitos de madera
Procedimiento
Paso 1 cortar la bolsa de plástico, en un cuadrado
Paso 2 unir los palitos de madera en forma de cruz, cortar un palillo si es necesario
Paso 3 Cortar tiras de hilo de 10 a 15 cm para sujetar cada una de las esquinas del papalote
Paso 4 tomar la bolsa de plástico y sujetarla con el hilo al palito de madera, repetir este paso para cada una de las esquinas
Paso 5 una vez sujetadas cada una de las esquinas, cortamos el excedente de plástico de tal forma que nos ayuden a darle equilibrio al papalote
Paso 6 sujetar el carrete al papalote por el centro
Paso 7 listo, es momento de esperar para que el viento eleve nuestro papalote.
Bolsa de plástico
Carrete de hilo
2 palitos de madera
Procedimiento
Paso 1 cortar la bolsa de plástico, en un cuadrado
Paso 2 unir los palitos de madera en forma de cruz, cortar un palillo si es necesario
Paso 3 Cortar tiras de hilo de 10 a 15 cm para sujetar cada una de las esquinas del papalote
Paso 4 tomar la bolsa de plástico y sujetarla con el hilo al palito de madera, repetir este paso para cada una de las esquinas
Paso 5 una vez sujetadas cada una de las esquinas, cortamos el excedente de plástico de tal forma que nos ayuden a darle equilibrio al papalote
Paso 6 sujetar el carrete al papalote por el centro
Paso 7 listo, es momento de esperar para que el viento eleve nuestro papalote.
Como hacer un Balero de lata
Materiales
1 lata reciclada
Un cordón
Una cinta tricolor
Tijeras
Pegamento liquido
Un palo de madera
Procedimiento
Paso 1 tomamos la lata y marcamos un orificio pequeño para colocar el cordón
Paso 2 colocamos el cordón y hacemos un pequeño nudo
Paso 3 sujetamos el cordón al palo de madera
Paso 4 colocamos un poco de pegamento liquido alrededor de la lata
Paso 5 pegamos el cintillo tricolor, cortamos el excedente
Paso 6 listo ha llegado la hora de jugar un rato
1 lata reciclada
Un cordón
Una cinta tricolor
Tijeras
Pegamento liquido
Un palo de madera
Procedimiento
Paso 1 tomamos la lata y marcamos un orificio pequeño para colocar el cordón
Paso 2 colocamos el cordón y hacemos un pequeño nudo
Paso 3 sujetamos el cordón al palo de madera
Paso 4 colocamos un poco de pegamento liquido alrededor de la lata
Paso 5 pegamos el cintillo tricolor, cortamos el excedente
Paso 6 listo ha llegado la hora de jugar un rato